Crítica: Revolutionary Road (* * * *)

Revolutionary Road: 8 (* * * *)
No puedo negar que tras ver esta película me siento un tanto defraudado.

La esperaba con muchísimas ganas, pues era volver a ver a Winslet y DiCaprio juntos (ya sabeis lo mucho que me gusta Titanic), de la mano de Sam Mendes (adoro American Beauty). A parte, el trailer me había dejado conmocionado.

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Por ello, se que suena extraño que en parte me siento decepcionado, pues creí que sería una de mis favoritas del año. Habría, quizás, funcionado mucho mejor como obra teatral que como película.

Esto es debido a que el peso de la película cae en su totalidad en el duelo actoral de unos magistrales Leonardo DiCaprio y Kate Winslet.

A DiCaprio nunca le habíamos visto en un papel como este. Por fin, lejos de Scorsese y demás personajes machotes y "heróicos" aquí le ponen en la piel de un fracasado, que no quiere salir de su vida de fracasado. En algunas escenas se come la pantalla a bocados. Es inexplicable que no fuese nominado al Oscar.

Y Winslet... Creo que con decir que es la mejor actuación que he visto de mi actriz favorita es suficiente. Creí que nunca podría hacer nada mejor que su alocada Clementine de Eternal Sunshine of the Spotless Mind (* * * * * +), pero me equivocaba. Kate está magnífica. Posee un personaje muy difícil de interpretar, pero le ha captado como solo ella sabe, y deja de ser totalmente Kate Winslet para transformarse en April Wheeler.

Kathy Bates también está fantástica, y ella es la protagonista de una escena final que deja sin aliento.

Pero, no debemos olvidarnos de Michael Shannon, que posee una nominación al Oscar merecidísima. Solo tiene dos escenas en toda la película, pero su personaje es tan clave y concreto, que esas dos escenas las hace totalmente suyas. Si no fuese por Heath Ledger, había que darle el premio ya.

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Poco a poco, me voy dando cuenta de que esta es una película como el vino. Puede dejarte un tanto frío tras su visionado, como a mí me ocurrió, pero cuando reflexionas sobre ella te das cuenta de que no es una película tan fría como parece.

Nada más terminar de verla, sentía que la faltaba "algo". Y ese algo era como una espina. Ahora me he dado cuenta de que es justamente donde radica la gracia de la película. Falta ese algo, pues si pusiesen algo para dejarte pasmado o asombrado en el final, se perdería la esencia de mediocridad de la película.

Es una buena película que retrata mediocres con aspecto mediocre.

Podríamos resumirlo en eso.

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Es por eso que ese gran discurso que dice Kathy Bates al final te deja tan perplejo. ¿Los protagonistas del film se esfuerzan por ser mediocres?

Así es.

Los diálogos entre Frank y April son magistrales y dignos de aplauso. Tantas falsas reconciliaciones, tantos te odios y te quieros falsos...

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Luego, la música está muy en la línea de Thomas Newman. Es decir, un breve fragmento musical que se repite a lo largo de la película (miren American Beauty y Buscando a Nemo para entenderlo), y luego, fragmentos más trabajados, en los momentos realmente importantes. La fotografía me ha gustado bastante, así como todo el apartado de ambientación.

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Para finalizar, decir que es una película de esas que hace pensar. Con un buen guión y unas actuaciones magistrales de todo el reparto. Siento mucho su olvido en unas cuantas categorías para los Oscar (pero no tiene fuerza para mejor película y director).

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Lo Mejor: Winslet, Shannon, Bates y DiCaprio.

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Lo Peor: Su visionado se hace un tanto frío.

domingo, 1 de febrero de 2009