Crítica: Moulin Rouge (* * * * *)

Moulin Rouge!: 10 (* * * * *)

Por fin la pude apreciar entera. Y es gracias a esta película a la que he encontrado la exacta definición de mis gustos de cine:

Amigos, estoy orgulloso de deciros que yo soy un bohemio.
Por fin, la palabra con la que describo todos mis gustos. Y no hay más que comprobar mis cinco pelis favoritas, adoro el amor (Titanic), la verdad y libertad (V de Vendetta), la belleza (Eduardo Manostijeras), la imaginación (El laberinto del fauno), el espectáculo (Chicago). Y así con una larga lista. ¡Sí! ¡Soy un bohemio en lo que respecta a gustos de cine! Adoro las películas grandilocuentes, con ambientaciones espectaculares, bellas, entretenidas, con trasfondo positivo...

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Por este gran descubrimiento que me ha hecho hacer esta maravillosa película, no la puedo dar otra nota que un 10, redondo. Me mantengo firme de que era la merecedora del Oscar en 2001 (por encima de La comunidad del Anillo, sí). Es un prototipo de película que adoro. Y ha cumplido con creces, estando en mi lista de 25 pelis favoritas, entrando con carrerilla.

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No se que puedo decir... un guión extremadamente profundo. Que no logro entender como no fue nominado al Oscar. Lo que empieza enganchándote como una comedia, acaba como una trgedia griega, con la pareja de enamorados luchando contra lo imposible... Un montón de metáforas visuales y auditivas...

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Actuaciones... una Nicole Kidman que me ha enamorado. Sutil y bella, excelente en todos sus fotogramas, haciéndo una evolución de su personaje digna de un gran aplauso (me parece incluso mejor que la que hace en Las Horas). Ewan McGregor, opacado por Mrs Kidman, pero con un derroche de voz impresionante. No sabía que este chico valía tanto en lo musical. Jim Broadbent, increíble, y yo le habría dado el Oscar por este papel (recuerdo que ganó el Oscar ese año, aunque por su papel en el film Iris). Un cásting de secundarios y extras, deseado por cualquiera.

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Y una ambientación, fotografía y montaje, exquisitas. Con todo el recargamiento visual de una época barroca, pero a su vez delicada y sutil de la época romántica. Y una música que merece mención a parte. Unos números musicales impresionantes, sobre todo ese Tango de Roxanne, y otros que me dejaron muy boquiabiertos fueron el de Show must go on, y por supuesto, el final con la espléndida canción Come Wath May.

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Y ahora, creo que con esa introducción he reflejado brevemente lo que esta película ha significado para mí. Quien no le guste y me vaya a criticar por esto, ya puede dejar de pasearse por mi blog. Pero soy bohemio, y a mucha honra. Esta peli me ha abierto los ojos. Por fin, lo logré. Creo que es a partir de que ves una película que te marca tanto, cuando de verdad puedes empezar a llamarte cinéfilo, y Moulin Rouge lo ha hecho. No logra colarse en mi top 10 de favoritas, pero con el tiempo... quien sabe.

Y de regalo, este maravilloso número musical, de El Tango de Roxanne, el que más me gustó de todos (sin spoilers).
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miércoles, 21 de mayo de 2008